En la precordillera escuchando excelente música, rodeada de persona tan diferentes a mi, pero sin embargo algo nos une. Nada importa, adoro estar rodeada de ángulos, escuadras, legos, masilla mágica, y mucho, pero mucho papel hilado.
Creo que es tiempo de redención, si bien el año pasado el panorama era totalmente diferente, además de encontrarme en un grado de disconformidad tremendo, esta vez el sentimiento dio un giro de trecientos sesenta grados, quizás eso se llama madurez y compromiso con uno mismo, no se, lo único que me queda claro es que me siento contenta haciendo lo que hago, no hay impedimentos, no hay nada que pueda detenerme quizá no soy la mejor, pero tengo todas las ganas del mundo y eso nadie me lo arrebatará.
Hay algo importante que debo mencionar, mas bien, alguien importante.
No te abandonaré, que no te quepa duda, estamos juntas en esto, ya comenzamos, solo falta arriesgarse un poco mas, creerse el cuento y terminarlo de una vez, para hacer luego lo que siempre hemos tenido en mente, te quiero.
Dedicado a N.C.
No hay comentarios:
Publicar un comentario